Tras el asesinato del reconocido líder religioso decenas de personas se acercaron para observar lo ocurrido. De acuerdo con lo que explicó uno de los vecinos y conocidos del pastor él tenía 8 hijos, todos menores de edad.
Asimismo, una de las vecinas del lugar explicó que el pastor Carlos Múñoz, de 55 años, estaba separado de su esposa y madre de sus hijos; sin embargo, mantenía buena relación con ellos.
Hasta la escena llegó uno de sus vástagos, quien se tiró sobre el cuerpo de su padre a llorar por su fallecimiento.
Según la información recabada hasta el momento, el hombre es originario de Nicaragua, pero residente en Catacamas.
A Carlos Muñoz lo asesinaron saliendo del culto que acababa de dar en la iglesia a la que se congregaba. De acuerdo con lo que dijeron algunos testigos, él salió a contestar una llamada y sujetos desconocidos lo interceptaron y le dispararon hasta quitarle la vida.
«Según la versión que se da, le hicieron una llamada al pastor y él la atendió. El hecho ocurrió a una cuadra y media (de la iglesia). Es lamentable lo que le pasó al pastor», manifestó uno de los testigos.