Incapaces de cumplir con los altos cobros que grupos criminales hacen para “brindarles seguridad”, los taxistas de la ruta Hato-Centro en Tegucigalpa paralizaron sus unidades este día.
Los taxistas han denunciado que varios grupos les cobran extorsión, pero ya no pueden cumplir con estos pagos.
En consecuencia determinaron paralizar sus unidades hasta obtener una respuesta de las autoridades hondureñas a su petición de garantizar sus vidas mientras prestan el servicio de transporte.
Decenas de usuarios de dicha ruta se afrontaron con la problemática de no poder llegar a tiempo a sus lugares de trabajo y centros de estudios.
Los vecinos de esta y colonias aledañas que hacen uso de esta ruta tuvieron que buscar alternativas para poder transportarse este día.
Cabe señalar que en la capital hondureña varias rutas del transporte y de taxis han sido cerradas a causa de la extorsión.
La extorsión consiste en obligar con violencia o intimidación a otra persona a realizar u omitir un acto o negocio jurídico en perjuicio de su patrimonio o del de un tercero.
En ese sentido, grupos delictivos exigen a los transportistas cobros a cambio de no atacarlos y dejarlos operar en las rutas ya establecidas.