La Policía española detuvo a veintisiete personas como presuntos miembros de una organización que introducía de manera regular en España a mujeres de Honduras y Paraguay para explotarlas sexual o laboralmente.
En la operación, realizada en Murcia (sureste) y Toledo (centro), fueron liberadas 19 mujeres víctimas de este entramado, que tenía una estructura formada por dos ramas diferenciadas, informó este jueves la Policía.
La primera rama estaba constituida por un clan familiar paraguayo asentado en Murcia, liderado por una mujer que explotaba sexualmente a compatriotas que traían engañadas y a víctimas de otras organizaciones criminales.
El otro grupo, liderado por una mujer de nacionalidad hondureña, se dedicaba a traer a España a mujeres de esa nacionalidad para trabajar como cuidadoras de personas mayores, cobrándoles por ello cantidades de hasta 7.000 euros (unos 8.000 dólares), y si no pagaban, eran explotadas sexualmente por la rama paraguaya.
La investigación comenzó gracias a una denuncia anónima enviada a un correo electrónico que la Policía española tiene habilitado para combatir la trata.
Con la información recabada, los agentes constataron la existencia de ambos grupos y procedieron a las detenciones. Nueve de los arrestados ya están en prisión provisional, incluidas las dos cabecillas del entramado.
Al parecer, no dudaban en maltratar a las mujeres, que vivían bajo la constante amenaza de graves represalias y la pérdida de propiedades en sus países de origen si no cumplían con el pago de las deudas contraídas. EFE