Un narcotraficante y exlíder del cártel de Los Cachiros testificó el jueves en un juicio que pagó un soborno de 500.000 dólares en 2006 dirigido a Manuel Zelaya Rosales, expresidente de Honduras.
A Zelaya, dijo Devis Leonel Rivera Maradiaga, le sobornaron para que pusiera de ministro de Seguridad del país a un primo de Rivera Maradiaga. Eso no ocurrió.
El Cachiro también afirmó que pagó un soborno de 250.000 dólares en 2012 dirigido a Juan Orlando Hernández, actual presidente de Honduras, a cambio de protección para no ser arrestado.
Devis Leonel Rivera Maradiaga dijo en una corte de Nueva York que hizo el pago en efectivo a una hermana de Hernández, llamada Hilda.
Los fiscales estadounidenses han mencionado al presidente hondureño varias veces en el juicio y han asegurado que aceptó sobornos a cambio de permitir el tráfico de drogas en su país.
Rivera Maradiaga también dijo haber sobornado al actual vicepresidente de Honduras, Ricardo Álvarez con la misma cantidad que a Zelaya en 2012.
Respecto del supuesto soborno del presidente Hernández, Rivera Maradiaga dijo que hizo el pago a Hilda Hernández a cambio de “protección para que no nos fueran a capturar en Honduras tanto la policía militar como la preventiva”. También dijo que lo hizo para no ser extraditado a Estados Unidos y para que Hernández siguiera favoreciendo contratos a empresas de Los Cachiros a través de las cuales hacían el lavado de dinero.
En 2012, Juan Orlando Hernández era presidente del Congreso. Ese mismo año Álvarez se postulaba, al igual que Hernández, a presidente del país. El mandatario Hernández ha negado repetidamente las acusaciones de fiscales estadounidenses y ex narcotraficantes que le han acusado de estar involucrado en el narcotráfico. Hernández no enfrenta cargos.
Rivera Maradiaga hizo las explosivas declaraciones en el juicio a Geovanny Fuentes Ramírez, un hondureño acusado de narcotráfico.
El fiscal Michael Lockard le preguntó a Rivera Maradiaga sobre el presidente ante la mirada de Fuentes Ramírez y los 12 miembros del jurado en la corte federal de Manhattan.
“¿Los Cachiros sobornaron a Juan Orlando Hernández con dinero de la droga?”, le preguntó Lockard.
“Sí, señor”, respondió Rivera Maradiaga, que iba vestido en uniforme de preso amarillo y esposado por los tobillos.
El narcotraficante dijo además que en 2013 se sentía “acorralado” porque la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos mencionó a los Cachiros: “Me mencionaban a mí, pero no a los otros narcos. No mencionaban a los políticos corruptos que habíamos sobornado. No mencionaban a los otros narcos que habían trabajado con nosotros. No mencionaban a los militares que habían trabajado con nosotros también”.
Las fotografías del presidente Hernández, el expresidente Zelaya y el vicepresidente Alvarez fueron mostradas en la sala de la corte cuando Rivera Maradiaga hablaba de los supuestos sobornos entregados a cada uno de ellos.
Poco después, el expresidente Zelaya reaccionó en su cuenta de Twitter y, sobre el mandatario Hernández, escribió: “EE.UU impuso a Joh como dictador, a sabiendas que es golpista, y vinculado a saqueo y redes de narcotráfico, sin importar el dolor del pueblo”. Posteriormente añadió otro mensaje en la misma red social y dijo: “Prueba irrefutable que nunca recibí un soborno es que jamás nombré un ministro, ni del crimen organizado, ni por presiones de la embajada americana”.
Fuente: AP