Siguiendo el camino de una vocación que descubrió desde niño, salvar vidas ya es uno de los principales logros por los cuales será recordado el joven bombero José Alemán, de 20 años, quien sorteó las embravecidas aguas del río Cececapa en la ciudad de Santa Bárbara, el pasado 5 de noviembre, para rescatar a 14 personas de tres familias, durante las inundaciones provocadas por la tormenta Eta.
Las tres familias del barrio El Junquillo fueron salvadas por la proeza realizada por Alemán, quien todavía era bombero voluntario e integraba un equipo de rescate que ayudaba a los afectados por las lluvias.
Los reconocimientos públicos de la sociedad en general no se hicieron esperar para Alemán y sus compañeros, pero este martes 10 de noviembre recibió una llamada que le cambió la vida.
Su primer gran sueño
Las agujas del reloj marcaban las 7:00 de la mañana cuando Alemán recibió la llamada del presidente Juan Orlando Hernández para felicitarlo y manifestarle que quería conocerle en persona.
Desde la ciudad de Santa Bárbara (Santa Bárbara), Alemán fue desplazado a petición del mandatario hacia San Pedro Sula. En horas del mediodía se dio el esperado encuentro en la pista del Aeropuerto Internacional Ramón Villeda Morales, donde Hernández realizaba una visita de trabajo para verificar los trabajos de limpieza después de las inundaciones.
«Llegué y (el presidente) me estrechó la mano. Me dijo que estaba muy orgulloso de mi labor, que era un verdadero héroe», comentó Alemán.
«Luego me dijo: ‘Bombero José Alemán, a partir de hoy es nombrado con plaza permanente en el Benemérito y Heroico Cuerpo de Bomberos de Honduras'».
«Mi primer sueño se cumplió al tener mi plaza asegurada», remarcó Alemán.
Comentó que fue un encuentro muy conmovedor y de mucha emoción «al tenerlo enfrente y dialogar, y ver que reconoce mi trabajo, así como el de otros compañeros más».
El presidente de la República ha reconocido reiteradamente el trabajo de todos los rescatistas que han auxiliado a miles de compatriotas afectados por las inundaciones.
«Gracias bomberos, Fuerzas Armadas, Policía Nacional, Copeco, Cruz Roja, y a todos los voluntarios del sector privado, alcaldes y a muchos hondureños más», expresó el gobernante el martes ante decenas de rescatistas en San Pedro Sula.
Proeza en el barrio El Junquillo
Alemán recordó que el rescate se realizó en el barrio El Junquillo, de Santa Bárbara, el pasado 5 de noviembre, cuando quedaron 14 personas atrapadas por las aguas y no tenían cómo salir.
«Tuvimos que pasar el río Cececapa, que al final por las lluvias intensas se formaron cuatro más. Se nos complicó mucho para poder llegar a rescatar a las familias, pero la misión se cumplió y eso es lo que nos llena. Saber que salvamos vidas», señaló.
Añadió que las labores de rescate iniciaron ese día de 8:00 de la mañana y se extendieron hasta las 4:00 de la tarde.
«Mi mayor satisfacción es saber que con un rescate, con mi esfuerzo y la voluntad de Dios se le brinda una segunda oportunidad de vida a una persona», resaltó el bombero.
A continuación, el bombero José Alemán comparte parte de su vida en esta entrevista.
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¿Cómo nace el sueño de ser bombero?
Este sueño nace desde 2013. Yo soy de Tegucigalpa (colonia El Pedregal), pero mi madre es de Santa Bárbara y me vine para acá y me enlisté como bombero voluntario por vocación, ya que mis tíos son bomberos también y quería seguir el ejemplo de ellos.
Inicié con un curso básico que me invitaron mis tíos hace 7 años atrás. La verdad, no sabía casi nada, apenas tenía 13 años, pero al venir acá me enamoré de la institución por su profesionalismo y entrega, y eso me gustó.
En 2015, se me condecoró por hacer mis primeros rescates en una Semana Santa en el río Ulúa, en el puente Tencoa.
¿Qué representa la fecha del 5 de noviembre?
Es una fecha imborrable en mi vida, ya que pude colaborar en el rescate de 14 personas en Santa Bárbara.
Arriesgué mi vida, al igual que lo hicieron mis compañeros, para salvar a las familias que corrían peligro de fallecer arrastrados por las fuertes aguas que recorrían todo ese sector.
Acá en esta emergencia todos hemos colaborado, desde Copeco, Cruz Roja, Fuerzas Armadas, Policía Nacional y Bomberos, arriesgando nuestras vidas por el pueblo hondureño.
¿Qué significa ser bombero?
Es apasionarse por el heroísmo en ayudar a la población.
¿Qué siente después de cada rescate?
Uno se siente lleno, por darle una segunda oportunidad de vida, primero por Dios y por nuestro trabajo.
Me siento más que alegre de salvar la vida de una persona y hasta de una mascota.
¿Cuál es la mayor recompensa en un rescate?
Un ‘gracias’ basta para sentirse lleno y saber que se cumplió con la misión de salvar una vida.
¿Cómo se ve en 10 años?
Me veo como un joven exitoso, escalando posiciones dentro de la institución.
¿Cómo le gustaría ser recordado?
Como el voluntario y el bombero que mostró que no es necesario obtener nada a cambio para realizar las cosas y ayudar a alguien.
¿Qué significado tiene haber hecho rescates durante la pandemia del covid-19 y la tormenta Eta?
Es un significado enorme. Marcó la vida de todos los hondureños, pero la mayor lección es que aprendimos a salir adelante y apoyarnos unos a otros. El covid-19 y Eta, significan el renacer de la nueva Honduras.
Más sobre José Alemán
– Edad: 20 años.
– Estado civil: Soltero
– Estudios: Egresado de la Escuela Nacional de Bomberos en 2019.
– Sueña con formar una familia y ser ejemplo para sus hijos.