Un masivo operativo de limpieza de playa desde la comunidad garífuna de Masca hasta la desembocadura del río Motagua inicio ayer temprano la Base Naval de Puerto Cortés junto con un equipo de medio centenar de colaboradores informó el capitán de Corbeta Donny Mauricio Zaldívar Ramos
El jefe militar naval dijo que esta limpieza forma parte de un proyecto para mejorar el medio ambiente playero fronterizo que se ha visto afectado por la problemática de la llegada de una impresionante cantidad de desechos sólidos y basura arrastrada por el principal afluente del hermano país.
La acción se arrancó en el sector llamado Estero Prieto de Masca con el apoyo de la junta de agua de la localidad, comisión ambiental de la Sociedad Civil del municipio de Omoa, Centro de Estudios Marinos de Omoa mas la presencia de una gran cantidad de pobladores que al ver el operativo se sumaron al operativo.
Esta intervención de limpieza de playa tendrá una primera fase de tres días sin embargo la misma se podrá extender dependiendo de la capacidad de recolección que tengan los brigadistas y también acá entra en juego las condiciones del tiempo que se manejan en esta zona del litoral interfronterizo, dijo el capitán Zaldívar.
Junior Madrid de la comisión ambiental ciudadana dijo que mientras los esfuerzos diplomáticos prosperan y el gobierno de Guatemala decida cumplir los compromisos firmados desde hace varios años a Omoa lo que le queda es seguir ejecutando sus propios planes para limpiar las referidas playas, en las que se acumulan toneladas de basura.
Esta acción de limpieza, en las que trabajan más de medio centenar de personas, ocurre un mes después que pobladores y autoridades de Omoa , solicitaron al gobierno del presidente Juan Orlando Hernández Alvarado que le reclamara a Guatemala por la contaminación en las playas, causada por la basura que arrastra el río Motagua que desemboca en el Caribe.
Hasta ahora la estrategia de las autoridades de Guatemala se ha basado en reducir, reciclar y retirar los desechos que arrastra el Motagua, para lo cual se habilitó un centro de acopio en la aldea El Quetzalito en el fronterizo departamento de Izabal pero aún no trabajan en la construcción de plantas de tratamientos de aguas residuales para completar el ciclo de cuidado del agua.