La operación tuvo lugar entre el 23 de marzo y 22 de abril del 2020, BANASUPRO se dispuso a comprarle al IHMA 23,487.8 quintales de frijoles a un valor unitario de 1,296.08 lempiras . El total de la operación, IHMA BANASUPRO fue de mas de TREINTA MILLONES de Lempiras.
Los granos provienen de la reserva estratégica y del Programa Mundial de Alimentos.
El IHMA despacho la cantidad del producto arriba indicada «Sin contar con ordenes de compra de BANASUPRO» y sin recibir ni un tan solo centavo ya que la venta se hizo al crédito y sin facturación oficial.
Con lo anterior se determina «Un problema en el control de la cantidad exacta que la entidad requería y el único documento que se contaba para la salida del grano era el comprobante de bascula».
Esta millonaria y dudosa operación se efectúo en el marco de la emergencia que vive el país por la pandemia del coronavirus.
Durante este periodo de emergencia , el IHMA comercializo también granos basicos a compradores privados.
Los compradores privados, que no han sido identificados, adquirieron del IHMA, 2,627 quintales de frijol rojo y 100 de maiz blanco.
En relación a la operación con los particulares, se detectaron algunas deficiencias como por ejemplo , contratos que no disponían de la factura de la venta, recibos que no coinciden con el precio del producto y contratos sin la firma del Gerente General.
Ademas, se detecto que algunas facturas no cuentan con el formato del régimen de facturación oficial que requiere el SAR.
Toda la información detallada en esta nota de prensa, se desprende de un documento emitido el 28 de abril del 2020, por el Tribunal Superior de Cuentas.
Sin embargo especialistas se han mostrado sorprendidos al conocer que el TSC lejos de encontrar los suficientes méritos para elaborar pliegos de responsabilidad a los involucrados y enviarlos al Ministerio Publico, destacan que mediante lo que ellos llaman Control Concurrente lograron mayor transparencia en el manejo y venta de granos básicos en el IHMA.
Tras los hallazgos, el ente investigador propuso recomendaciones para que en las operaciones de compra venta de granos el IHMA disponga de controles adecuados y que BANASUPRO emitiera ordenes de compra para evitar malos entendidos.
En sus conclusiones, el TSC establece que «Al realizar la ultima inspección de entrega de granos a BANASUPRO, en la bodega de Silos Kennedy (IHMA) se pudo comprobar que se están utilizando controles oportunos para generar un nivel de confianza aceptables».
Lo que no dice el Tribunal Superior de Cuentas es ; donde están los mas de 30 millones de lempiras que se gastaron en la supuesta compra, tampoco dice si BANASUPRO pago lo adeudado, no identifica quienes son los particulares que también le compraron al IHMA y por el contrario, se muestra complaciente al soslayar la gravedad en el uso de facturas no oficiales, el uso de recibos que no coinciden con el verdadero precio del producto y contratos sin la firma del Gerente General.
Hablando claro, el Tribunal Superior de Cuentas investigo, encontró indicios racionales sobre la comisión de un ilícito pero ignoro todo esto al darse por satisfecho , cuando los involucrados siguieron sus recomendaciones para no volver a cometer semejantes ilícitos , argumentando que » El control concurrente es la acción que permite que los actos administrativos sean examinados desde el inicio del proceso hasta finalizarlos, dando la oportunidad de detectar cualquier situación irregular y corregirla aplicando de esa forma la función de asesoría que permite la Ley».
