Ciento cincuenta hondureños varados en Estados Unidos por la pandemia del COVID-19 viajarán este sábado a su país de origen en un vuelo a precio reducido, gracias a una iniciativa en la que participaron tanto el Gobierno como la sociedad civil de Honduras, a través de la Fundación 15 de Septiembre.
El cónsul general de Honduras en Miami, Ricardo Estrada, confirmó este miércoles a Efe la salida de este vuelo de la compañía Spirit con destino a San Pedro Sula, que partirá del aeropuerto de Fort Lauderdale (40 kilómetros al norte de Miami) el 18 de abril.
El avión tiene capacidad para 230 pasajeros, pero en razón de las medidas de distanciamiento social por el COVID-19 solo podrán viajar 150, señaló Estrada.
El precio negociado con Spirit es de poco más de 200 dólares por boleto. Las personas incluidas en una base de datos elaborada por la red consular de Honduras pueden adquirir sus pasajes a través de la página web de Spirit.
El consulado ha reservado plazas para un grupo de 15 personas de edad avanzada o enfermas que tienen «prioridad» en el vuelo.
Otros dos vuelos, operados por United Airlines, con hondureños varados en EE.UU. partirán de Houston (Texas) hoy, miércoles, y el viernes.
El cónsul indicó que el Gobierno de Honduras emitió este lunes el permiso necesario para que Spirit aterrice en el aeropuerto de San Pedro Sula, pues tanto los aeropuertos como las fronteras terrestres del país centroamericano están cerrados como medida para reducir la expansión del coronavirus.
En total se han registrado 419 casos y 31 muertes por COVID-19 en Honduras desde que el pasado 11 de marzo se tuvo constancia del primer caso, según las últimas cifra oficiales.
Estrada recordó que los días 28, 29 y 30 de marzo el Gobierno de Honduras ayudó a retornar a unas 1.300 personas de origen hondureño que se encontraban en Estados Unidos.
UN ESFUERZO CONJUNTO
Estrada reconoció la labor realizada por la Fundación 15 de Septiembre, que agrupa a hondureños asentados en Florida, para involucrar a Dale Holness, alcalde del condado de Broward (sureste del estado), en los primeros esfuerzos para establecer contacto con Spirit.
Después la negociación pasó a manos de la embajada de Honduras en Washington y del consulado general en Florida.
Juan Flores, presidente de la fundación, que había reclamado insistentemente al Gobierno de Honduras ayuda para los hondureños que no podían regresar a su país, también se mostró satisfecho en declaraciones a Efe por haber logrado ese propósito en conjunto con el consulado.
«La verdad es que nos sentimos muy contentos. Es un gran mensaje para el Gobierno y el pueblo de Honduras: si nos unimos todos, podemos salir adelante», dijo Flores, quien defiende que la voz de los hondureños emigrados que envían dinero al país para ayudar a sus familias deben ser tenida en cuenta por el Gobierno.
Según fuentes oficiales, alrededor de 1,5 millones de hondureños viven en el exterior, en su mayoría en Estados Unidos, y esos emigrantes envían remesas a sus familias que en 2019 sumaron 5.400 millones de dólares, lo que significa un 20 % del PIB del país.
En el sur de Florida se concentran unos 180.000 hondureños, la mayor parte en el condado de Broward, cuya capital es Fort Lauderdale, y la cifra total de hondureños en EE.UU. puede haber llegado al millón y medio con el éxodo de los últimos años, según Flores. EFE