El gobierno venezolano ordenó el domingo la expulsión del personal diplomático de El Salvador y le dio 48 horas para abandonar el país, tras la decisión del gobierno salvadoreño de echar a los diplomáticos venezolanos del país centroamericano y dar su respaldo al líder opositor Juan Guaidó.
La cancillería venezolana indicó en un comunicado que declaró “persona no gratas” a los integrantes del personal diplomático salvadoreño “en estricta aplicación del principio de reciprocidad, tras el inaudito anuncio del gobierno de El Salvador de expulsar al personal diplomático venezolano debidamente acreditado en ese país”.
“En este caso, las autoridades salvadoreñas no procuran otra cosa que suministrar un exiguo balón de oxígeno a la menguante estrategia estadounidense de intervención y bloqueo económico contra en pueblo de Venezuela”, resaltó el escrito.
“De esta manera, Nayib Bukele, asume oficialmente el triste papel de peón de la política exterior estadounidense”, agregó.
Bukele, quien asumió el cargo en junio, respondió en un tuit burlón señalando que aquellos a quienes se les ordenó abandonar Venezuela eran restos del gobierno anterior.
“Se me olvidó mencionar que nuestro Gobierno no había nombrado ni un solo funcionario en nuestra embajada en Venezuela. Así que el régimen de Maduro acaba de expulsar a funcionarios nombrados 100% por el Gobierno del (expresidente Salvador) Sánchez Cerén, a quienes llamaban sus amigos”.
A través de Twitter, Guaidó agradeció el “espaldarazo” dado, destacando que la medida “aísla más al régimen de Maduro. Es parte de la presión internacional que nos tiene que encontrar en las calles”.
Por su parte el ex guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), aliado del régimen venezolano emitió un comunicado oficial en el que expresa su rechazo a la decisión del gobierno de Bukele y se solidariza con el pueblo venezolano y “su legítimo presidente Nicolás Maduro”.
El FMLN afirma que el reconocimiento de “un presidente de facto, que ha sido impuesto por un grupo de la oposición venezolana, en complacencia con intereses foráneos, le quita a El Salvador la posibilidad de aportar al diálogo ya emprendido por el gobierno y por diversos sectores en Venezuela”.
Agrega que la expulsión de diplomáticos de un país amigo como Venezuela va en contra de la historia de lucha y dignidad que en este instante están construyendo los pueblos de América.
El anuncio se produjo horas después que el gobierno de Bukele ordenó la expulsión del cuerpo diplomático de Venezuela y le otorgó 48 horas para salir del país, reconociendo la legitimidad del líder opositor Juan Guaidó, que como jefe de la Asamblea Nacional se declaró en enero presidente interino.
“El gobierno de El Salvador expulsa al cuerpo diplomático del régimen de Nicolás Maduro, siendo coherente con las reiteradas declaraciones del presidente Nayib Bukele, en las que no reconoce la legitimidad del gobierno de Maduro”, indicó un comunicado de prensa de la presidencia de la Republica, publicado el sábado en la cuenta oficial de Twitter del mandatario salvadoreño.
El gobierno del presidente Bukele, “reconoce la legitimidad del presidente encargado Juan Guaidó, mientras se realicen elecciones libres, en concordancia con la Constitución venezolana”, indicó el texto.
Casi de inmediato, el embajador de Estados Unidos en El Salvador, Ronald Johnson, celebró la decisión del gobierno salvadoreño y reiteró su llamado a que “Maduro abandone el poder” para que se celebren elecciones.
“Aplaudimos al gobierno del presidente Nayib Bukele por asegurarse que El Salvador está del lado correcto de la historia al reconocer a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela”, escribió Johnson en su cuenta oficial de Twitter.
Al menos 50 gobiernos reconocen al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, por considerar que la reelección de Maduro en 2018 fue fraudulenta.
El Salvador además indicó que esperaba recibir en un futuro cercano las credenciales de la nueva representación diplomática de Venezuela.
El comunicado recordó que la representación salvadoreña se sumó a otros 20 países de la Organización de Estados Americanos (OEA), al aprobar el pasado agosto una resolución que respaldaba el informe de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, “donde se admitió y certificó que el régimen de Nicolás Maduro realiza violaciones sistemáticas a los Derechos Humanos contra los venezolanos”.
La nota oficial concluía expresando que el gobierno salvadoreño siempre estará a favor de la democracia y defiende los derechos humanos, por lo que apoyará votaciones libres, supervisadas por la comunidad internacional y que garanticen la voluntad del pueblo venezolano.-AP