Los agentes de la Dirección Nacional de Fuerzas Especiales «Cobras», que desde el martes se encuentra de brazos caídos, ofrecieron hoy una conferencia de prensa en el que leyeron un comunicado, en el que aseguraron que su protesta no es por dinero, sino por violaciones a Derechos Humanos.
Elementos policiales asignados al Cuartel General de Casamata, sede de la Policía Nacional, se unieron al paro que mantienen los Cobras.
Los agentes de la Policía que paralizaron labores explicaron que ellos no quieren reprimir a la población, pero que se ven obligados por mandos superiores.
«Somos sometidos a trabajos forzosos como ir a reprimir al pueblo. Ir a desalojar a personas, familias que quizá no tienen ni para el diario vivir, ni para movilizarse de un lugar a otro. Solo le pedimos a la población mil disculpas si en algún momento hemos actuado mal en algún momento», indicó un agente de la Policía mientras tenía el rostro cubierto.
Agregó: «Seguimos en la lucha para que el Gobierno mejore o ceda ante esta amenaza que tenemos en frente».
Gas en Casamata
Durante la toma en Casamata, miembros de la escala básica lanzaron gas lacrimógeno en señal de protesta contra la cúpula policial.