El presidente del Parlamento de Honduras, Mauricio Oliva, dijo hoy que la oposición política fue la que recomendó un aumento salarial a los 128 diputados propietarios e igual número de suplentes, que ahora cuestionan algunos de los mismos miembros del legislativo y varios sectores sociales del país.
“Una insigne diputada sugirió que nos subiéramos el sueldo pero que nos quitáramos los subsidios, y que le diéramos el alto honor de presentar ella esa iniciativa, se le dio, nos quitamos el fondo departamental y seguimos bajos de la aceptación popular”, indicó Oliva a periodistas.
Oliva recordó además que la baja aceptación popular de los diputados también siguió después de que hace varios años se les suspendió la inmunidad de la que gozaron por mucho tiempo.
La “insigne diputada” a la que Oliva hizo alusión, sin citar su nombre, es Doris Gutiérrez, del minoritario Partido Innovación y Unidad Social-Demócrata (PINU-SD), quien dijo a Efe que la petición fue un acuerdo entre todos los jefes de bancada (ocho) que integran el Parlamento.
Aunque el incremento al salario que vendría para los diputados comenzó a trascender a finales de abril, fue hasta inicios de mayo que se supo que había sido aprobado, pero oficialmente no se divulgó el monto.
Hasta ahora Gutiérrez y la treintena de diputados del Partido Libertad y Refundación (LIBRE), primera fuerza de oposición, son los únicos que han expresado su rechazo al aumento, por considerarlo “desproporcionado”.
“No estoy haciendo justificaciones, yo estoy diciendo (…) que es una decisión que se tomó de manera colegiada y que surgió de la oposición política misma (se aprobó por) unanimidad, de eso yo no voy a dar un paso atrás”, enfatizó Oliva.
Medios locales de prensa han informado de que el aumento aprobado es 35.000 lempiras (unos 1.458 dólares), con lo que su salario pasaría a 90.000 lempiras (3.750 dólares).
Gutiérrez indicó que todavía no sabe si el depósito que le hicieron en su cuenta, por alrededor de 74.000 lempiras (unos 3.083 dólares) equivale a uno o dos meses, pero que no lo aceptará porque es una decisión política tomada en su partido.
Añadió que ella estaba de acuerdo en un ajuste salarial, pero con la condición de que a los diputados se les suspendieran los subsidios que recibían y que eso fue lo aprobado por el pleno.
La sorpresa ha sido, según Gutiérrez, que el equivalente a los subsidios que se les entregaba para obras sociales, fue traspasado al aumento salarial.
Gutiérrez indicó que el salario que ha venido recibiendo es de 55.000 lempiras (2.291 dólares) pero que ahora oficialmente no sabe a cuánto asciende porque en el Parlamento no ha habido la suficiente transparencia con lo de la mejora salarial a los diputados.
En la página web del Parlamento hondureño no hay información sobre el salario que devengan los diputados, ni del incremento que habría sido aprobado en marzo.
Sobre por qué se ha venido otorgando subsidios a los diputados y a nivel departamental cuando su misión es hacer leyes, Gutiérrez expresó que “es una vieja costumbre que se ha hecho ley”, en parte porque mucha gente que les da el voto cree que ellos deben ayudarle en algo.
Como ejemplo citó que cada comienzo de año muchos hondureños pobres acuden a los diputados a pedir ayuda para matricular a sus hijos en la escuela o el colegio, y que así sucede en ocasiones especiales como el “Día de la madre” o el “Día del niño”.
“En mi caso, los pocos subsidios, los que se dan a discreción del presidente del Congreso (Parlamento), los he repartido entre mujeres emprendedoras y de todos he rendido informes de la forma en que se han entregado”, señaló Gutiérrez.-EFE