Miles de hondureños atendieron hoy el llamado del Gobierno y de la Secretaría de Seguridad para vacunarse contra la influenza H1N1 que amenaza la salud de las personas más vulnerables de la sociedad.
Niños menores de cinco años, mujeres embarazadas, personas de la tercera edad, con diabetes, hipertensas, con cáncer, con enfermedades crónicas, entre otras, acudieron desde tempranas horas a los diferentes centros de salud y hospitales del país para aplicarse la respectiva vacuna.
Por la mañana el presidente Juan Orlando Hernández realizó un llamado a la ciudadanía del Distrito Central y el departamento de Cortés para que se aplicaran la vacuna contra la influenza que ha cobrado muchas vidas.
El mandatario anunció que están a disposición 1.9 millones de vacunas solo para comenzar la jornada de vacunación que cuenta con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud (OMS/OPS).
Desde las 5:30 de la mañana el centro de salud Alonso Suazo de Tegucigalpa abrió sus puertas para recibir a los miles de capitalinos dispuestos a contrarrestar el H1N1.
Roberto Fonseca, de 65 años, residente en el barrio Morazán confió que llegó a aplicarse la vacuna porque padece de diabetes y quiere prevenir desenlaces fatales.
Por su parte, María Virginia Sánchez, de 65 años y residente en la colonia Villanueva, agregó que llegó a vacunarse porque anteriormente había sido víctima de la H1N1.
“Me di cuenta que tenía que vacunarme a través de los medios de comunicación. Además tenía dolor en diferentes partes del cuerpo y con mayor intensidad en la espalda”, añadió.