La Policía Internacional (Interpol) emitió, por solicitud de la justicia panameña, una alerta roja para localizar y capturar a Ricardo Alberto Martinelli Bejarano, presidente de Panamá de 2009 a 2014. Martinelli, de 65 años, investigado por espionaje, está autoexiliado en Miami desde enero de 2015 mientras las demandas y los escándalos atizan las hogueras políticas en Panamá, con numerosos jerarcas de su quinquenio haciendo fila para entrar o salir de prisión por los casos de una supuesta corrupción en su Gobierno.
Algunos medios periodísticos de la capital panameña, como La Prensa y La Estrella, destacaron este martes la confirmación de la orden que la Interpol emitió con fecha de 22 de abril de 2017 en contra del magnate que gobernó Panamá y que enfrenta más de 10 casos judiciales por actos de presunta corrupción cometidos durante su Administración.
Según los documentos que trascendieron públicamente, a Martinelli se le atribuyen los presuntos delitos en contra de la «inviolabilidad del secreto y del derecho a la intimidad» (interceptación de comunicaciones) y contra «la inviolabilidad del secreto» (seguimiento, persecución y vigilancia sin autorización judicial).
En su mandato presidencial, Martinelli ganó fama como el hombre mejor informado sobre los enigmas, las intimidades y las intrigas de la política, la prensa, la iniciativa privada, los sindicatos, los indígenas y los negocios en Panamá, sin olvidar a los abogados, los jueces y los demás potenciales amigos o enemigos. En los corrillos políticos panameños corrió el secreto a voces de que, con paciencia, Martinelli armó un expediente de cada personaje mediante un presunto andamiaje de «pinchazos telefónicos» o de espionaje que ahora le pasa factura.
Una alerta vieja
Aunque mantiene una intensa actividad en su cuenta de Twitter, el expresidente evitó referirse en las últimas horas a la acción de la Interpol. Su esposa, la panameña Marta de Martinelli, aseguró en su cuenta de esa misma red que es una alerta vieja, «solicitada hace alrededor de dos años». Al pie de una fotografía en la que aparece a bordo de una bicicleta y que publicó el pasado 20 de mayo en Twitter, Martinelli narró que es su «ejercicio diario para estar en condiciones» en 2019, cuando «regrese a mejorarle la calidad de vida al país». «Haremos un mejor Panamá». Martinelli ha argumentado ser inocente, pero víctima de una implacable persecución política de su sucesor, el presidente Juan Carlos Varela, quien rechaza esos ataques.
El rotativo La Estrella también aseguró que «un mes después» de la notificación todavía sigue sin aparecer en la página web de la Interpol, pero la emisión de la alerta fue confirmada por autoridades oficiales de Panamá. En junio de 2015, y en un golpe a Martinelli, la Corte Suprema de Justicia de Panamá aprobó enjuiciarlo por las escuchas telefónicas o espionaje.
Por abstenerse de acudir a un citatorio en diciembre de 2015, el ex jefe de Estado fue declarado en rebeldía por la justicia panameña, donde acumula numerosos expedientes sobre los secretos.-ElPais.com