Un informe elaborado por la organización internacional encargada de combatir la corrupción y sus nexos con el medio ambiente, Global Witness, denuncia que con fondos provenientes del escandaloso desfalco al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), se construyó el lujoso hotel ubicado en la zona norte de la costa caribeña de Honduras, Indura Beach and Golf Resort.
Según Global Witness, el proyecto ha sido impulsado por las elites más poderosas del país, “Entre ellas se encuentran el expresidente de Honduras Ricardo Maduro; Epaminondas Marinakis, presidente de la Cámara Nacional de Turismo de Honduras; y Camilo y Pedro Atala, miembros de una de las familias empresariales más adineradas de Honduras”.
En la documentación se revela que “el nombre comercial del hotel aparece en un informe de la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado que ha sido filtrado a Global Witness, como receptor de fondos corruptos procedentes del Instituto Hondureño de Seguridad Social180. En este impresionante escándalo de corrupción, altos funcionarios del Instituto Hondureño de Seguridad Social están acusados de robar 350 millones de dólares (USD) mediante una red de empresas fantasma, que dejó a pacientes enfermos sin acceso a medicamentos vitales. Parte de este dinero se canalizó hacia la campaña para la elección del actual presidente, Hernández182, y ahora parece que otra parte de los fondos se usó para financiar el desarrollo del Indura”.
El expediente también detalla que “según el informe interno, el 11 de marzo de 2013, se transfirieron poco más de 100.000 lempiras (5.000 USD) a Desarrollo Bahía de Tela desde una cuenta creada para blanquear fondos de la seguridad social183. Un año más tarde, se adquirió un terreno en el complejo hotelero Indura por valor de 287.000 dólares (USD) a cargo de Gabriela María Laínez Reina, una de las personas al frente de los presuntos cerebros del fraude, entre las que se encontraba también el exdirector del Instituto Hondureño de Seguridad Social184. Asimismo, un consorcio de bancos regionales liderado por el banco Ficohsa de Camilo Atala185, que está siendo investigado por blanqueo de dinero en Panamá, otorgó un crédito de 20 millones de dólares (USD) al proyecto hotelero”.
La denuncia hecha por Global Witness ha sido respaldada por su representante Billy Kyte quien afirmó lo siguiente:
¿Quién mueve los hilos?
La ONU rescata a delegado de Global Witness
Luego que Kyte compareciera en un foro matutino de televisión para explicar los hallazgos del organismo internacional, varios funcionarios y acérrimos defensores del oficialismo pidieron que el Ministerio Público mandara a arrestar al exponente por “calumnias”.
Al concluir el foro, la discusión se tornó más acalorada, al extremo de intimidar a Kyte, obligando la intervención de la oficina de DDHH de la ONU para sacarlo “de emergencia” del canal donde ocurrió el incidente.
AQUÍ EL INFORME COMPLETO: Informe Global Witness Honduras