Tomado de proceso.hn
El presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, manifestó este jueves que los partidos de oposición, cometerían “un error craso” si se niegan a participar en las elecciones generales de noviembre de 2017, debido a que son ocho los partidos inscritos en el Tribunal Supremo Electoral (TSE), y con dos o tres que participen, se valida el proceso.
En declaraciones a Radio Cadena Voces, Oliva aseveró que los líderes políticos de la oposición no se han preocupado por buscar los consensos ya que presentaron una propuesta para un plebiscito y las preguntas que hacen son distintas a las expresadas en la figura jurídica del artículo 105 constitucional, lo que va obligar al Poder Legislativo a evacuar individualmente cada una de esas iniciativas.
Sin embargo, consideró que hay un avance sustancial porque en tiempos pasados no se permitía hablar del tema de reelección y ahora la discusión es como deberá realizarse, para lo cual se debe sentar a dialogar y buscar una salida que satisfaga a la clase política y al pueblo del país.
“No se trata de continuismo, si no de darle la oportunidad a una persona que ha ejercido la presidencia de la Republica, a que participe en otro proceso electoral en iguales condiciones de los demás representantes de los partidos en contienda”, argumentó Oliva.
Explicó que el Partido Nacional como institución política han decidido ponerle límites a la permanencia en el Poder Ejecutivo y regularla para que la ley establezca que la reelección sea por una sola vez, como sucede en los Estados Unidos.
“Hay posiciones bien cerradas y ortodoxas en las distintas fuerzas políticas, pero deben instruir a sus bancadas para llegar a un acuerdo y que se pueda reglamentar en el Congreso Nacional, la forma de cómo se hará la reelección” reiteró.
Añadió que no es mediante decreto que va a seguir en la presidencia del Poder Ejecutivo el actual gobernante, sino que debe someterse a la voluntad del pueblo y ser electo tal como lo establece la Constitución de la República.
Asimismo, recordó que si los partidos en oposición deciden unirse tienden a disminuir su capacidad de influencia política porque se volvería invisible en el patrón electoral y perderían parte importante de su membresía.