La Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York presentó el miércoles cargos contra Roberto de Jesús Soto García, un socio clave en Honduras del Cartel de los Soles, por su presunta participación en el 2015 en una operación para enviar “varios cientos de kilogramos” de cocaína pertenecientes a los arrestados sobrinos del gobernante venezolano Nicolás Maduro.
Según documentos de la corte, el acusado “acordó participar en un emprendimiento de transporte de cocaína con Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas”, los sobrinos de la pareja presidencial de Venezuela que se encuentran tras las rejas en Nueva York esperando el juicio por narcotráfico.
Soto García acordó recibir el cargamento de droga en el Aeropuerto Internacional Juan Manuel Gálvez de Honduras, en conversaciones que fueron grabadas por agentes policiales.
Entre otras cosas, el acusado “acordó suministrar información sobre los horarios del aeropuerto, ayudar a recibir el avión cargado de cocaína, retirar la droga de la aeronave y tomar medidas para evitar la detección del cargamento por parte de las autoridades policiales y de aduanas del aeropuerto”, señala la acusación presentada el miércoles en la corte.
La acusación también hizo mención de un encuentro sostenido el 6 de noviembre en Honduras entre Francisco Flores, Soto García y otras personas, donde “transacciones con cocaína” fueron discutidas.
Fuentes cercanas a la investigación dijeron a el Nuevo Herald que Soto García jugaba un importante papel dentro del Cartel de los Soles, organización criminal operada por militares y altos dirigentes del chavismo que monopoliza las operaciones del narcotráfico en Venezuela.
“Este tipo es el operador más importante que tenían los sobrinos para mover la droga. Es el hombre de la logística, el que arreglaba la entrada de los aviones en el aeropuerto”, dijo una de las fuentes que habló bajo condición de anonimato.
“Pero no solo trabajaba con los sobrinos. Tiene muchos años trabajando con el cartel, en particular con la operación que encabeza [el gobernador de Aragua] Tarek El Aissami, y su entorno. Es un personaje que tiene ya tiempo trabajando con ellos”.
Los atribulados sobrinos de la pareja presidencial fueron arrestados el 11 de noviembre del 2015 en Haití, al término de una operación encubierta de ocho meses donde los jóvenes aparecen en video negociando los 800 kilos de cocaína de alta pureza.
Al momento de su arresto, los jóvenes declararon a los agentes de la DEA que la droga pertenecía al entonces presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, quien es investigado por las autoridades estadounidenses bajo sospecha de que encabeza el denominado Cartel de los Soles.
Pero la versión fue desmontada rápidamente por los agentes, y los sobrinos presidenciales posteriormente testificaron que la droga pertenecía al gobernador del estado Aragua, Tarek El Aissami, quien también es investigado por las autoridades.
Entre tanto, la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York también presentó cargos el miércoles contra seis funcionarios de la Policía Nacional de Honduras que formaban parte de una red de narcotráfico que presuntamente garantizaba el tránsito por el país centroamericano de cocaína proveniente de Colombia y de Venezuela.
Según un comunicado de prensa emitido por la oficina de la fiscal Preet Bharara, los acusados enfrentan cargos por conspirar para importar cocaína a los Estados Unidos y por cargos por porte de armamento.
“Hoy, presentamos cargos contra seis funcionarios de la Policía Nacional de Honduras por participar en una masiva conspiración para traficar drogas que presuntamente inundaron a Estados Unidos con cocaína”, dijo Bharara en el comunicado.
Según la información suministrada por la fiscal, y el Agente Especial Encargado de la División de Operaciones Especiales de la Agencia Antidrdroga (DEA), Mark Hamlet, los acusados aseguraban el libre tránsito por Honduras de toneladas de cocaína y pagaban sobornos a funcionarios gubernamentales para obtener información sobre investigaciones internas y sobre los puntos de control.
“Entre el 2004 y aproximadamente el 2014, múltiples organizaciones de narcotraficantes de Honduras y de otros lugares trabajaron juntas, y con el apoyo de los acusados, y otros, para recibir cargamentos de varios cientos de kilos de cocaína enviados a Honduras desde Venezuela y Colombia a través de rutas aéreas y marítimas y transportaban las drogas hacia el Oeste de Honduras, hacia la frontera de Guatemala y eventualmente hacia Estados Unidos”, señalan los documentos de cortes presentados.
Los seis acusados fueron identificados como Ludwig Criss Zelaya Romero, Mario Guillermo Mejía Vargas, Juan Manuel Ávila Meza, Carlos José Zavala Velásquez, Víctor Oswaldo López Flores, y Jorge Alfredo Cruz Chávez.
Entre los cargamentos protegidos por los acusados se encuentran los del hijo del ex presidente hondureño Porfirio Lobo, Fabio Porfirio Lobo, quien se declaró culpable de cargos relacionados con el narcotráfico el pasado 16 de mayo.