La última investigación del Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) demuestra cómo pagó Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti sus excéntricos gustos.
Un hotel en Antigua Guatemala, casas de descanso en la paradisiaca Roatán, en Honduras, vehículos Jaguar y motocicletas Harley Davidson, son algunos de los “juguetes” que adquirió el binomio presidencial, según la investigación, para lavar el dinero proveniente de las coimas de los contratistas del Estado.
Con facturas y testimonios de Juan Carlos Monzón, la fiscalía logró confirmar cómo se pagaron los caros gustos de Pérez y Baldetti, como la finca Zaragoza que tenía Otto Pérez Molina en Chimaltenango, una propiedad por la que habría pagado Q5 millones.
En total se documentó 38 propiedades del exbinomio que representan unos Q27.4 millones, entre estos el Hotel Mansión de la Luz, en Antigua Guatemala, por el que Roxana Baldetti pagó Q8 millones.
Las casas de descanso no fueron más discretas; una finca en Boca Ancha, Izabal, costó Q1.2 millones, mientras que en Roatán, Honduras, se adquirió una propiedad por la que se pagó unos Q750 mil.