Respondiendo a las directrices del Presidente Juan Orlando Hernández, mediante el uso de burdas maniobras, representantes de la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH) se aliaron a otros representantes de la sociedad civil, para el nombramiento “descarado” de Arnaldo Bueso (FOPRIDEH) y Omar Rivera (ASJ), quienes se encargaran de elegir a los propietarios y suplentes para formar parte de la junta que escogerá a 45 candidatos a magistrados de la Corte Suprema de Justicia.
El malestar de las demás organizaciones, entre ellas las defensoras de derechos humanos, se dio porque la CEH llevó como representantes a un grupo de pastores para superar a las en número a las demás organizaciones e imponer, al mero estilo “Cachureco”, a quienes deberán escoger a los representantes ante la Junta Nominadora.
Las organizaciones que se sintieron afectadas, increparon de manera directa a Gerardo Facussé, representante de la CEH, por el servilismo y la actitud cómplice que mostraron para complacer los propósitos malsanos de Juan Orlando Hernández para manipular la Junta Nominadora y lograr proponer a personajes ligados a todo el entorno de corrupción del actual gobierno.
Mediante mecanismos propios de las mafias, la Confraternidad Evangélica junto a sus cómplices impusieron de manera perversa a Arnaldo Bueso (FOPRIDEH) y Omar Rivera (ASJ), personas ligadas a Juan Orlando Hernández.
Fue tanto el malestar que la Iglesia Católica a través de Caritas, retiró a sus representantes para evitar hacer comparsa a las jugadas sucias de la CEH.