Los negocios eliminaron por completo las construcciones que habían hecho con el objetivo de atraer más visitantes.

Las coloridas estructuras fueron removidas desde el pasado mes de febrero, cuando la Fiscalía Especial de Medio Ambiente (FEMA) comenzó una investigación. Tras varios estudios determinó que contaminaban el único lago natural de Honduras, ubicado entre los departamentos de Cortés, Comayagua y Santa Bárbara.

Los dueños de los negocios que están en el Lago y que habían construido enfrentan un proceso legal y cuentan con medidas diferentes a la prisión

Luego de que se difundieran las imágenes varios usuarios comentaron a favor del cambio, algunos dijeron que se miraba más limpio, e incluso agradecieron a las autoridades que intervinieron.

«La verdad es que está mucho mejor, nunca me gustaron los miradores», «muy bello se ve se puede apreciar mejor el lago», «Hasta más limpio se ve, recuerdo que parecía quebrada cuando fui la primera vez», son algunos de los comentarios.

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